Saga Vanir - El libro de Jade (21 page)

Jade se había enamorado perdidamente de Thor y Thor de ella. Parecían dos perros en celo, persiguiéndose por las noches, practicando todas las posturas, unas veces de modo tierno, otras veces rudo y violento, en función siempre del momento y el calor de la pasión. Ambos eran apasionados, sin duda.

Luego había otros resúmenes extensos sobre cómo eran los vanirios. Sobre la necesidad de su cáraid, sus parejas... Parecía interesante, pero lo pasó de largo. Llegó a otra parte del diario más informativo.

Nos hemos convertido en amantes fugitivos. Somos conscientes de que las diferencias
entre berserkers y vanirios son completamente insalvables. Si decimos que estamos juntos,
habrá una guerra de nuevo. O peor, nos matarán por haber cometido desacato. Pero
estamos enamorados y queremos disfrutar de nuestro amor todo el tiempo que nos regale la
vida.

Así que hemos decidido irnos de Inglaterra. No podemos ocultarnos por más tiempo.
Debemos encontrar un sitio ideal para nuestras características. Creemos que Rumania es una
buena opción.

Thor está un poco apenado por dejar su clan y a su mejor amigo Caleb, pero está todavía
más afligido por las diferencias que han distanciado a las dos razas hasta el punto de matar
por matar, de perseguir por perseguir, o de prohibir por prohibir. Yo estoy apenada por no
poder despedirme de mi padre, As. Pero es lo que nos toca vivir ahora a Thor y a mí. Es lo que
e

arrastra la historia de los vanirios y los berserkers. Ambos somos seres mágicos de linajes
d

ancestrales y, sin embargo, eso es lo único que tenemos en común, por lo visto.
Ja

de

Los Balcanes tienen su encanto. La gente aquí es cálida y aunque hay berserkers y
orb

vanirios, increíblemente, parece que se soportan mejor que en Inglaterra o al menos... ésa es
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la impresión. Algunos humanos conocen de nuestra existencia, pero seguimos entre los mitos
E -

y las leyendas. En realidad no quieren creerle. No nos hemos querido relacionar con ningún
1 0r

clan. No sabemos hasta qué punto podrían volar las noticias hasta las islas y, aunque
in

sabemos que al parecer no hay mucha relación entre los clanes alrededor del mundo,
Vae

tampoco queremos arriesgarnos.

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Estoy embarazada. Thor y yo hemos hecho nuestro pequeño milagro. Las berserkers

-ti

tenemos carnadas, pero yo no estoy segura de que vayan a ser más de uno, sobre todo al ser
nel

el padre un vanirio, pero Thor desea que así sea. Dice que quiere réplicas nuestras en
Va

miniatura. Yo me he echado a reír. Es tan tonto...

a

Len

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Sorpresa inesperada la de hoy. Samael nos ha encontrado. No sabemos muy bien cómo,
pero ha asegurado que el vínculo entre hermanos es tan fuerte que al final pudo encontrarlo.
Nadie sabía que Thor y yo nos habíamos fugado juntos. Ahora Samael lo sabe, pero no sabe
que estoy embarazada. Hemos decidido no decirle nada. Por lo visto, no se va a quedar, pero
sí que le ha exigido a Thor que esté en contacto con él, al menos. Para no preocuparse
innecesariamente. Thor ha accedido.

Hoy ha nacido nuestro bebé. Es una niña increíblemente hermosa y rodeada del aura de
luz más pura y bonita que hayamos visto jamás. Thor se ha echado a llorar de la emoción y
yo también. Me hubiera gustado que mi padre conociera a mi hija, pero no sé cómo
reaccionarían al saber que es hija de un vanirio. Y Thor deseaba que en un día tan especial
sus amigos, Caleb y Daanna, así como Menw y Cahal, estuvieran presentes, sobre todo Caleb
que, aunque no son hermanos de sangre, sí que lo son de alma y corazón.
Thor está afectado por eso. Cree que está traicionando a su amigo pero, al igual que yo,
prefiere no decir que se ha enamorado, casado y creado una familia con una berserker y no
porque nos avergüence, sino porque podría haber represalias indeseadas en ambos bandos.
Por lo demás, hoy es nuestro día más feliz. No hemos tenido ningún problema para escoger el
nombre. Se llamará Aileen. Dice Thor que en su lengua significa luz y a mí me han
sobrecogido sus palabras. Entonces, que el mundo la conozca como Aileen, la luz que
iluminará sus noches y nuestros días.

Eileen se enjuagó las lágrimas. El dolor aparecía a intervalos cada vez más cortos y seguidos. El libro la ayudaba a mantener la atención alejándola del foco del dolor, pero cada vez le costaba más.

Aileen. Qué bonito.

Hay unos hombres muy extraños merodeando por las montañas. En el pueblo, se están
dando varias muertes en circunstancias un tanto peculiares. La gente señala a los bosques
como la procedencia de los que se hacen llamar nosferátums, vampiros que matan a los
humanos y se beben sus almas.

Estos hombres extraños dicen buscar a los nosferátums. No sé qué pensar.
Aileen ya tiene un año. Es un bebé sano y precioso. Puede salir al sol sin quemarse, bebe
leche de mi pecho y tiene unos ojos enormes y rasgados de color azulado. El color de los ojos
de su padre antes de que los Dioses le convirtieran en vanirio. Ahora son de un color lila que
quita el sentido.

ed

No lo entiendo, cuanto más tiempo pasa, más nos necesitamos el uno al otro. Más
Ja

necesito de su contacto y de su cuerpo. Es como una enfermedad. Bendita enfermedad...
deor

He empezado a comprender lo que significa ser su cáraid. El también es el mío. No puedo
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vivir sin él y él tampoco sin mí.

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Thor está inquieto y yo también. Las muertes se suceden aprovechando las guerras de los
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Balcanes. Unos mueren por las balas o las bombas, otros por el hambre y otros están
in

muriendo porque los vampiros los están asesinando. Y no sólo ellos. Últimamente parece que
Vae

están siendo atacados por lobos. No quiero imaginar que los lobeznos estén por aquí. Algo
ire

tengo muy seguro: ni los berserkers ni los vanirios somos responsables de esas muertes.
S -ti

Aileen ya ha cumplido dos años.

nel

Nuestras dudas se han confirmado. Están tomando a vanirios y berserkers por igual. Nos
Va

vigilan y nos persiguen. No buscan nosferátums. Nos buscan a nosotros. Hay una
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organización de hombres humanos que cogen a la gente de las montañas y luego no los
devuelven. Esas desapariciones son la excusa perfecta para culparnos e ir a nuestra
búsqueda. Nos quieren responsabilizar, pero no es verdad.

Nuestra pequeña Aileen... Puede que no esté segura aquí.

Thor y un grupo de vanirios, junto con unos cuantos berserkers, han formado un grupo de
protección de clanes. Hay que barrer la zona e investigar a fondo a estos cazadores.
Hoy han matado a otro vanirio. Kerzhakov. Su cáraid está en shock. Las mujeres
intentamos prestarle ayuda, pero creemos que ha caído en una gran depresión.
Hoy Anna, la cáraid de Kerzhakov, se ha entregado voluntariamente al sol. Ha muerto.
Thor y los demás han descubierto la organización y a sus cabecillas. El principal instigador
se llama Mikhail Ernepo. Hay otro hombre llamado Patrick Cerril y otro que se llama
Sebastián Smith. Ellos son la cúspide de la organización.

Hoy Thor le ha dicho a Aileen que tenía un amigo muy guapo para ella para cuando fuera
toda una mujer. Se trata de su mejor amigo, Caleb. Yo no lo he llegado a ver, pero seguro que
si es parecido a él, tiene que ser arrebatador.

Eileen reprimió una arcada. Estaba literalmente tirada en el suelo. Su cuerpo sólo respondía al dolor. Leía el libro de lado e intentó mantener los ojos abiertos. Si alguien la encontraba en esa posición, ¿qué iba a hacer?

Caleb. No podía ser él. Se negaba a crees que fuera él.

Le dolía la cabeza, las sienes le iban a estallar, los ojos iban a salirle de órbita. Le dolían los dientes y los pechos. Tenía la sensación de que los huesos se le estaban congelando y le crujían con cada movimiento.

Mikhail Ernepo. Maldita sea. Él estaba en el ajo.

Hemos decidido regresar a las islas y alertar los clanes sobre estas organizaciones. No
sabemos cómo alcanzan a los vanirios ni a los berserkers, pero creemos que trabajan en
conjunto con los vampiros y con los lobeznos. Es la única respuesta que se nos ocurre. Ellos
tienen el poder mental para captarnos. ¿Por qué nos persiguen estos humanos? Yo una vez
creí que se aliarían con nosotros, no que irían en contra. No les hemos hecho nada. Somos
buenos, defendemos a los humanos. Y, sin embargo, estos cazadores trabajan con los
vampiros para darnos caza.

Creemos que están intentando extraer algo de nuestros cuerpos, algo que los vampiros
ed

anhelan o que incluso los humanos desean y, aunque no sabemos con exactitud qué es, tiene
Ja

que estar relacionado con mutaciones genéticas de algún tipo.
deor

Aileen tiene cuatro increíbles y tiernos años. Nos tiene cautivados.
bi L

Desde ayer, estos asesinos nos persiguen. Hemos regresado a Dudley para alertar a los
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vanirios, pero creemos que los cazadores ya tienen gente que trabaja para ellos justo aquí,
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en Black Country. No podemos movernos sin levantar sospechas, y creemos que nos siguen.
rin

No podemos llevarles ni hasta los vanirios ni hasta los berserkers. Quisiera poder avisar a
Va

papá. Así que esperamos que Samael se encargue de alertarlos a todos. A nosotros nos
eire

persiguen casi en manadas. Me da miedo pensarlo, pero creo que saben que somos una
S -

pareja de razas distintas y que de esa unión ha nacido alguien como Aileen. Temo por ella...
tin

Creo que les interesa mucho. Estas personas se han organizado y se han distribuido por
el

aquellos lugares de la tierra donde existen nuestras razas y se están aprovechando de
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nuestra poca comunicación.

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Eileen pasó la siguiente página, pero ya no había nada más escrito. Se estaba poniendo el sol, se acercaba la oscuridad, la noche. Empezaba a perder el conocimiento cuando su cuerpo se tensó

para amortiguar otra convulsión que le sacudió las entrañas y la dejó a cuatro patas. Quiso vomitar, pero no tenía nada en el estómago, sólo bilis. La bilis se le quedaba en la garganta y la amargaba.

Otra convulsión. Cada vez más seguidas, más fuertes.

¿Era ella Aileen?

Las preguntas se le amontonaban sin resuello y el maldito dolor acompañado de temblorosos espasmos no le daba tregua.

Jade... Jade se había transformado a la edad de 22 años. A partir de las doce de la noche, ella cumpliría la misma edad. No podían darse tantas casualidades... No, por favor. El sol se había ido. Sintió aullar un perro y miró a los alrededores del parque. Estaba sola de verdad.

La siguiente convulsión le hizo caer de lado y quedarse como un ovillo. Gruñó hundiendo la cara en la hierba y apretó el libro contra ella.

Se estaba muriendo y no iba a aguantar eso mucho más.

Una convulsión más. Ésta la dejó boqueando, desesperada por respirar, por obtener aire. Las lágrimas le nublaban la vista. Ya no podía moverse. La mirada a ras de suelo. Dos pares de sandalias Quicksilver se pararon enfrente de ella. Los pies grandes con dedos de uñas bien cortadas y pelos de hombre.

No podía alzar la mirada para verles.

—Eh, mira —dijo uno de ellos. —El olor viene de ella.

—Joder, a esta chica se la ha tirado un colmillos —dijo el otro con desprecio. Sintió que una cara de facciones anguladas y muy morena, se agachaba para mirarla a los ojos. Tenía el pelo muy corto y rubio platino.

—Creo que está mutando —la miró a la cara y le puso la mano en la frente. —Está ardiendo. Sintió cómo le ponía un brazo bajo las piernas y otro bajo los hombros y la levantaba sin ninguna dificultad.

Ella no soltaba el libro.

—Madadh-allaidh —dijo ella sin fuerzas. Recordó las palabras de Thor, en el sueño. Wolverhampton... Los Madadh-allaidh.

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—¿Ha dicho lo que creo que ha dicho? —preguntó el otro chico.

Ja

—¿Nos buscabas, pequeña? —preguntó el que la tenía en brazos. —Dime, ¿quién te ha hecho
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esto?

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Otra convulsión y ganas de vomitar. Esta vez devolvió sangre sobre la camiseta del chico.
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—Vamos a llevarte a un lugar más cómodo —afirmó él sin alterarse. —Tu cuerpo está

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cambiando, cariño.

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Eileen se agarró a la camiseta del chico y hundió su cara en el ancho hombro del joven. Ya no
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aguantaba más y no le importó que la cargaran en brazos.

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Caleb estaba alterado. Surcaba los cielos en dirección al centro de Dudley. Eileen tenía que
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estar por ahí, no podía haber ido muy lejos. Desde que había dejado de verla, su cuerpo se había
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resentido y se le había formado un agujero hueco a la altura del estómago. Ella le había devuelto el olor y el sabor. Saciaba su hambre insatisfecha desde hacia milenios. No quería creer que ella fuera su cáraid, pero su corazón, su cuerpo y su miembro le decían que sí lo era. Era increíble, una broma del destino.

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