Read Judy Moody Está De Mal Humor, De Muy Mal Humor Online
Authors: Megan McDonald
Tags: #Infantil y juvenil
¡Te presentamos a Juddy Moody, al plasta de su hermano pequeño, Stink, a su mejor amigo Rocky y al pesado de Frank Pearl!
¡Menudos cambios de humor los de Judy Moody! Buen humor, mal humor, un humor de perros… sobre todo el día de la vuelta al colegio. Pero cuando el profesor Todd pide a la clase que cada uno haga un collage sobre sí mismo, Judy se lo pasa tan bien que casi se olvida de su mal huomr. Durante un mes, tendrá que ir componiendo un collage que le permita explicar a los demás cómo es ella, Judy Moody: su color favorito, lo más divertido que le haya pasado nunca, su mascota favorita, clubes a los que pertenece… El único problema es que no pertenece a ningún club. ¿Cómo se las ingeniarán Judy Moody y su mejor amigo Rocky para formar uno?
Megan McDonald
Judy Moody Está De Mal Humor, De Muy Mal Humor
Judy Moody - 1
ePUB v1.0
Staky20.08.12
Título original:
Judy Moody was in a mood. Not a good mood. A bad mood
Megan McDonald, 2000
Traducción: Atalaire
Ilustraciones: Peter H. Reynolds
Diseño/retoque portada: Peter H. Reynolds
Editor original: Staky (v1.0)
ePub base v2.0
Para mis hermanas Susan, Deborah, Michele y Melissa
Megan McDonald
Para mi hija Sarah y su gato Twinkles
Peter H. Reynolds
Judy
Todos conocen sus cambios de humor: sus miradas de trol son terribles… Cuando dice
Grrr
, es mejor alejarse de ella.
Papá
El padre de Judy. Experto en crucigramas y puzzles.
Mamá
La madre de Judy. Está pendiente de todo. Tiene muy buen carácter. Le gustan las mascotas.
Stink
El hermano pequeño de Judy. La sigue a todas partes.
Mouse
La gata de los Moody. Un poco vieja y miedosa.
Rocky
El mejor amigo de Judy de toda la vida.
Frank
Compañero de clase de Judy. Hace años que va detrás de ella.
Sr. Todd
Más conocido por Sr. Todo, es el mejor profesor de Tercero del mundo.
Judy Moody no quería que se acabara el verano. No le apetecía nada peinarse todos los días, ni aprenderse de memoria listas de palabras para luego deletrearlas, y menos todavía sentarse en clase con el pelma de Frank Pearl.
Judy Moody estaba de mal humor. De muy mal humor.
Ni siquiera pensar en sus lápices nuevos Gruñón conseguía sacarla de la cama.
—¡Hoy empieza el colé! —canturreó su madre—. Así que a levantarse y a vestirse.
Judy se echó la manta por encima y metió la cabeza debajo de la almohada.
—¿Me has oído, Judy?
—¡Grrr! —contestó.
Tendría que acostumbrarse a una clase nueva y también a una mesa que no tuviera su nombre escrito en una pegatina, como la del curso pasado. Tampoco habría un erizo llamado Roger en la clase.
Y seguro que tendría la mala pata de que la pusieran otra vez en primera fila, con lo que el señor Todd la vería cada vez que pasase un mensaje a Rocky, su mejor amigo. La madre volvió a asomar la cabeza por la puerta de su habitación:
—No te olvides de peinarte, ¿vale?