Añadió, sin que su mujer pudiese comprender:
—¡A pesar de todo! Prefiero ocuparme de un auténtico muerto, asesinado por un auténtico criminal. Despiértame a las once. Tengo que ir a presentarle el informe al jefe.
No dijo nada acerca de que no tenía intención de dormir; solamente le preocupaba lo que iba a decir en el informe.
¿Podía explicar la verdad clara y simple, que privaría a la señora Gallet de los trescientos mil francos del seguro y que la enfrentaría con su hijo, con Eleonora, con Tiburcio de San Hilario, y que la apartaría de nuevo de sus hermanas y de sus cuñados?
Volvería a enredarse una madeja de intereses, de odios, de procesos judiciales inacabables. Tal vez un juez escrupuloso haría exhumar —¡para proceder a un nuevo examen!— el cadáver de Emilio Gallet.
Maigret no tenía consigo el retrato del muerto, pero no se trataba ahora de solucionar un problema que tuviese relación con este rostro desaparecido.
«Su mejilla derecha se había puesto completamente encarnada. Empezó a correr la sangre. Gallet seguía en pie mirando fijamente al mismo punto, como si estuviese esperando algo».
—¡La paz, demonios! ¡Eso es lo que esperaba! —refunfuñó Maigret levantándose mucho antes de la hora prevista.
Poco más tarde informaba a su jefe:
—¡No he sacado nada en claro! No podemos hacer más que olvidar este asunto.
Entretanto, calculaba:
—El médico asegura que no hubiese vivido más de tres años. Pongamos que la compañía de seguros pierde sesenta mil francos. Dispone de un capital de noventa millones.
1
. Legitimismo es el nombre de la corriente que apoya al restablecimiento del reinado de la Casa de Borbón en Francia. Los legitimistas reconocen, desde 1830, a los Borbones como herederos del trono de Francia, en caso de que se restaurase la monarquía en ese país.
2
. La Champagne es la provincia de Francia donde se elabora el champaña.