Authors: Jorge Molist
—Estabais en lo cierto. He fracasado en mi misión —me dijo.— He perdido la carga de la séptima mula. He perdido a la Dama Grial.
Yo le acaricié el pelo.
—Pero ahora sois libre —repuse.— Sois libre de amarme, de hacerlo por entero, como yo siempre anhelé.
—Sí, lo soy —repuso pensativo.— Lamento muchísimo la pérdida, pero bien sabe Dios que cumplí en todo la palabra dada. Fracaso en mi misión, pero estoy limpio de culpa y es ese sentimiento el que me hace libre.
Calló unos instantes. Parecía ordenar sus pensamientos mientras yo le observaba ansiosa. Al fin de un tiempo que me pareció eterno, en el cual notaba la esperanza palpitando en mi pecho, me miró a los ojos y los míos verdes se encontraron con los suyos oscuros.
—¿Sabéis, Guillemma, que siempre os quise? —dijo.
La sorpresa me hizo quedar muda y una tímida sonrisa iluminó la faz de Hugo de Mataplana.
—Os amo desde antes de conoceros, os amo desde antes de nacer. He fracasado en mi misión con el Rey y lo lamento infinitamente. Pero me habéis liberado de mi palabra, de mi esclavitud. Dama Ruiseñor, Bruna, Guillemma o como os guste llamaros —dijo con solemnidad,— ¿me aceptáis como vuestro trovador y caballero para siempre? ¿Queréis ir conmigo a Mataplana? ¿Queréis hacerlo para ser mi esposa?
No pude contestar. El llanto ahogó mis palabras. Me refugié en sus brazos y mojé su pecho con mis lágrimas. Daba gracias al cielo. Mis rezos habían sido escuchados; lo que poco antes parecía imposible estaba ocurriendo.
—Vos sois mi Grial —me iba diciendo.— Ya sea rey, papa o villano, nadie podrá apartaros de mí.
Atrás dejamos las ciudades arrasadas, las hogueras de tufo infame, a los refugiados desnudos muriéndose de hambre, a los practicantes del amor cátaro, a los adoradores del Fin'Amor, a los nigromantes, a los crueles y a los héroes, a las iglesias bañadas en sangre, a los atardeceres hermosos y llenos de trovas, a los que recorrían los caminos pobres y descalzos por Cristo, a las viñas arrancadas, al miedo agazapado en los rincones... Miles de imágenes, de recuerdos, se agolpaban en mi mente al cruzar los escarpados desfiladeros de los Pirineos. Dejaba mucho atrás. Dejaba, incluso, lo que fui; a mí misma. Pero todo aquello no tenía ya la menor importancia. Mi Grial me esperaba en la otra vertiente de los montes, se encontraba ya a mi lado. Le miré maravillándome de mi suerte y él me sonrió.
Y le imaginé con el pelo ya cano, dentro de muchos años, él trovándome aún con su guitarra y yo respondiéndole feliz con mi vihuela.
Al salir de un desfiladero, Hugo me mostró el paisaje. Aquéllas ya eran tierras del rey Pedro. Por unos instantes, estuvimos contemplando los valles hacia los que descendía el camino. Los colores eran verdes, rojizos y amarillentos, mientras que en las cumbres se vislumbraba ya el blanco de la nieve. El aire era transparente, la brisa, suave y el sol de la tarde lo bañaba todo en oro. Di gracias a Dios, sentí la paz, y gocé de la belleza.
Vi como él olfateaba el aire de su tierra llenando sus pulmones como si se deleitara con el mejor de los perfumes. Contempló otra vez con detenimiento el paisaje. Sonrió y me hizo un gesto iniciando el descenso. Encomendándome al Señor, azucé mi montura para seguirle.
Qu'el'es mos jois et el'es tot cant ai, e res no.m am mas leys cui amar suel.
[(«Ella es mi joy y todo cuanto poseo, nada quiero sino a ella, y para siempre la amaré.)]
Pone, de la Guardia
FIN
Amaury de Montfort (1190-1241)
Hijo mayor de Simón de Montfort y Alice de Montmorency. Sucedió a su padre a la muerte de éste en 1218 como señor de Occitania. Cedió sus derechos al rey Luis VIII de Francia y participó en las cruzadas de Tierra Santa, donde fue hecho prisionero en Gaza y sufrió cautiverio en Babilonia. Murió en el camino de regreso a Europa.
Arnaldo (Arnaut) Amalric (P-1225)
De origen occitano y pariente de los Lara, vizcondes de Narbona. Abad de Poblet antes de convertirse en el poderoso abad general de la Orden del Císter. Nombrado legado papal, predicará en Occitania junto a Peyre de Castelnou y sus frailes cistercienses. Con la llegada de Domingo de Guzmán, adoptó por un tiempo la forma humilde de predicación de éste. Después del asesinato de Peyre de Castelnou, pasó a promover en el norte la cruzada contra Raimon VI, conde de Tolosa, para después liderarla. El 1212 es nombrado arzobispo de Narbona y participa en la batalla de las Navas de Tolosa en apoyo de los reinos hispanos. El dominio del vizcondado de Narbona le enfrentó con su antiguo aliado Simón de Montfort.
Aymeric de Canet
Personaje no histórico. Comendador del Temple en la posesión de Douzens. En 1133 Bernard de Canet y Aymeric de Barbaria, junto a sus familias, donaron el castillo de Douzens a «Dios y a la santa milicia del Temple». El personaje sería descendiente de los donantes.
Berenguer III, arzobispo de Narbona (P-1213)
Hijo natural de Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona, y regente de Aragón. Fue abad del monasterio de Montearagón en Huesca, obispo de Tarazona y obispo de Lérida.
En 1191 fue nombrado arzobispo de Narbona, aun conservando el título de abad de Montearagón, de donde continuaba cobrando rentas.
Enfrentado con el papa Inocencio III, éste dijo de él: «Es un hombre que no conoce más Dios que el dinero». Fue prestamista de su sobrino Pedro II a cambio de las rentas de distintos feudos que él se encargaba de cobrar con sus ejércitos privados. Señor de Narbona junto con el noble Aymeric de Lara, dominaba sobre éste. Se le depuso en 1212 y Arnaldo Amalric tomó el arzobispado.
Bernard de Béziers
Defensor de Béziers. Senescal (jefe militar) de la ciudad por el vizconde Trencavel.
Habitaba el castillo-palacio vizcondal, del que destacaba su alta torre.
Bota de Maureilhan
Defensor de Béziers.
Bruna de Béziers
Personaje no histórico. Protagonista de la novela. Hija del senescal Bernard de Béziers.
Conde de Nevers. Hervé de Donzy
Uno de los grandes nobles cruzados.
En su tienda, se negoció la rendición de Carcasona en la que el vizconde Trencavel fue traicionado. Rechazó el vizcondado de Carcasona y Béziers.
Conde de Saint Pol
Uno de los grandes nobles cruzados de la íle de France.
David Quimhi
Personaje no histórico que toma su nombre de un rabino de Narbona que defendió a Maimónides en pleno debate de la comunidad judía española y occitana sobre la filosofía de éste. Véase Salomón ben Abraham, que, al contrario, se oponía a Maimónides.
Maimónides fue un brillante médico, filósofo, astrónomo y teólogo judío cordobés nacido en 1135.
Domingo de Guzmán (1171-1221)
Nació de familia noble y estudió humanidades, filosofía y teología. Se ordenó sacerdote, fue catedrático universitario y presidió la comunidad de canónigos de Osma. En 1205, el rey Alfonso VIII de Castilla encargó una misión diplomática en la corte danesa a Diego de Acebedo, obispo de Osma, y éste llevó consigo a Domingo como embajador. En sus viajes, ambos clérigos estuvieron en contacto con distintas herejías y a su regreso a Roma solicitaron permiso al Papa para predicar entre los paganos del norte. Éste les envió a hacerlo contra los cátaros de Occitania y en 1206 se encontraron en Montpellier con los legados papales, a los que convencen, gracias a la autoridad papal, para que prediquen en la pobreza y humildad, tal como lo hacían los cátaros a imitación de Cristo. Después del asesinato de Peyre de Castelnou, los legados promovieron la recién proclamada cruzada en las tierras del norte mientras que Domingo decidió continuar con su labor pastoral humilde y pacífica en Occitania. Estableció su base en Prouille, muy cercana de Fanjeaux, que era un bastión de señores cátaros. En 1208 fundó la Orden de los predicadores, que después se llamaría de los dominicos. Rechazó los ricos obispados de Conserans, Béziers y Comminges con el fin de continuar su predicación en pobreza, y en 1215 estableció en Tolosa la primera casa de su Orden. Aunque convivió con el legado papal Arnaldo Amalric y Simón de Montfort, no parece que jamás secundara sus métodos. Se destacó por su piedad, amor al prójimo, el seguimiento del ejemplo de Jesús, despreciando su cuerpo físico, al que sometía a castigos y penitencias con el fin de purificar su alma. Murió en Bolonia en 1221. En 1233 el papa Gregorio IX designó a los dominicos como los encargados de la lucha contra los herejes. Éste fue el acto fundacional de la Inquisición. Aunque en su origen la Inquisición parecía un avance en derechos humanos, ya que no se ejecutaba a los acusados como anteriormente se hacía sin un juicio formal, pronto se convirtió en un instrumento de terror y opresión, lejos de lo predicado por Domingo. La figura del santo fue manipulada posteriormente para justificar las desviaciones inquisitoriales de sus seguidores.
Duque de Borgoña Eudes III
Uno de los grandes nobles de la cruzada.
Fulko de Marsella (Folquet) (1155-1231)
Mercader, poeta y trovador, se hizo monje en 1201 y después fue nombrado obispo de Tolosa. Protegido de Inocencio III, predicó la cruzada junto a Arnaldo Amalric.
Elocuente y despiadado contra los cátaros, fue enemigo del conde de Tolosa.
Golem
Ser de amplia tradición en la cultura judía. Aparece ya en la Biblia y en el Talmud.
La primera referencia de un golem es el propio padre Adán, creado del barro, antes de que Dios le insuflara el alma. El más famoso de ellos perteneció a un rabino de Praga que le encargó la misión de defender la sinagoga y a sus fieles judíos contra los antisemitas.
Guillermo (Guillaume) de Montmorency
Personaje no histórico. Sobrino de Alice de Montmorency, esposa de Simón de Montfort, y primo de Amaury de Montfort. Protagonista de la novela.
Guillemma
Prima de Bruna.
Hugo (Hug) de Mataplana IV (Huget) (1173P-1213)
Señor de Mataplana IV, famoso trovador y caballero muy cercano al rey Pedro II.
Luchó a su lado en las Navas de Tolosa y murió de las heridas recibidas peleando junto a éste en la batalla de Muret.
Hugo (Hug) de Mataplana V (Huget hijo)
Personaje histórico protagonista de la novela. Segundo hijo del anterior Hugo, pasó a ser su heredero de Mataplana al morir su hermano mayor Ramón en 1197.
Inocencio III (1160-1216)
Giovanni Lotario de Segni, conde de Segni, fue nombrado cardenal a los 30 años y Papa a los 37. Sobrino del papa Clemente III, hábil político, astuto e intransigente, luchó por la supremacía del papado no sólo en lo espiritual, sino también en lo terrenal. Decía que Dios le había encargado el gobierno «no sólo de la Iglesia universal, sino del mundo entero» Los reyes debían someterse a su poder. Siguiendo el modelo carolingio, consideraba al rey francés su mayor aliado.
Milos
Legado papal que en 1209 sometió al conde de Tolosa a penitencia pública de azotes en Saint Gilles. Murió poco después.
Orbia de Pennautier. La loba de Cabaret (Cab d'Aret) Hija de Raimon, señor de Pennautier, llamado el Lobo. Esposa de Jourdain de Cabaret, hermano de Peyre Roger y coseñor de Cabaret. La dama más seductora de su época. Fue cantada por muchos trovadores, destacándose los famosos Peyre Vidal y Raimon de Miraval. Reina del Joy y señora de la Fin'Amor. Grandes señores de la época viajaron a Cabaret para cortejarla, entre los que se encontraban el conde de Foix y los señores de Mirapeis, Montreal y Saissac. Tuvo un hijo con el conde de Foix, al que se llamó Lobo de Foix.
Pedro II, «el Católico», rey de Aragón, conde soberano de Barcelona (1177-1213)
Fue también señor de Provenza y distintas posesiones en Occitania. Incorporó Montpellier a sus dominios al casarse con María de Montpellier. Muchos de los señores occitanos fueron sus feudatarios. De espíritu trovadoresco, mujeriego y desprendido, estuvo continuamente endeudado por sus gastos en festejos y batallas. Peleó frecuentemente contra los musulmanes al lado de su primo Alfonso VIII de Castilla, con quien le unió un gran afecto. Vencedor junto a éste y Sancho VII de Navarra en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212, murió en la batalla de Muret luchando temerariamente en primera línea contra los cruzados de Simón de Montfort.
Peyre Roger de Cabaret (Cab d'Aret) (Cabeza de carnero o de ariete) Líder de la resistencia occitana en la cruzada, señor principal de Cabaret. Ayudó a su señor el vizconde Trencavel durante el sitio de Carcasona.
Peyre de Castelnou (P-1208)
Abad de Fontfreda, fue nombrado legado papal y predicó junto a Arnaldo Amalric contra los herejes occitanos. Polémico y de enérgico temperamento, usó la amenaza con frecuencia contra los nobles occitanos. Después de una fuerte discusión con el conde de Tolosa en Saint Gilles, fue asesinado en las orillas del Ródano en enero de 1208.
Peyre Vidal
Activo como trovador del 1175 a 1205. De origen humilde y natural de Tolosa, frecuentó las cortes de Aragón, Cataluña, Castilla, Occitania y Provenza. Famoso por sus amores con la Loba de Cabaret, tuvo también aventuras galantes en Marsella, Chipre y Constantinopla.
Pons I, abad de Saint Gilles
Gobernó la abadía desde 1208, poco después de la muerte de Pierre de Castelnou, hasta 1241.
Pons de Corneilhan
Defensor de Béziers.
Raimon de Miraval (1135-1216)
Pequeño señor del Aude, desposeído de su castillo de Miraval por Simón de Montfort en 1209. Fue un brillante trovador de la Fin'Amor. Protegido del conde de Tolosa y del rey de Aragón.
Raimon VI, conde de Tolosa (1156-1222)
Cuñado del rey Pedro II al estar casado con su hermana Elionor. Fue protector de trovadores y tolerante con herejes y judíos. Tuvo frecuentes disputas con los grandes terratenientes eclesiásticos. Casado cinco veces, fue excomulgado tres, muriendo en tal estado. Evitaba el combate y prometía lo que sabía que no podía cumplir. Sus antecesores fueron enemigos de los condes de Barcelona pero él se hizo vasallo del rey Pedro II en busca de protección. Su bisabuelo fue el mayor de los señores que lideraron la primera cruzada, conquistando Jerusalén en 1099.
Raimon Roger Trencavel, vizconde de Carcasona, Albí y Béziers (1185-1209)