De modo que a nosotros nos sobraba confianza. Y Norma Jeane, que era la más joven de la clase, no tenía ni un ápice. Ella sólo contaba con su luminosa piel pálida, sus ojos de color azul oscuro y un entusiasmo que parecía una corriente eléctrica imposible de contener, una corriente a la que había que dejar salir hasta que se agotara.
Después de sus actuaciones, alguno de nosotros le preguntaba en qué había pensado durante el ejercicio —porque, joder, nos apabullaba y resultaba tan difícil reírse de Norma Jeane como de las fotografías de Buchenwald de Margaret Bourke-White— y ella respondía con su vocecilla infantil: «Oh, no pensaba en nada. Supongo que estaba recordando».
Sin embargo, le faltaba seguridad. Cada vez que tenía que interpretar una escena, temblaba como si fuera la primera vez, y ésa sería su perdición. En aquel entonces tendría diecinueve o veinte años, pero ya se notaba que estaba perdida. Era la más bonita de la clase y aun así el menos dotado de nosotros era capaz de destruirla con una palabra, una mirada, un amago de burla. O sencillamente haciendo como si no existiera cuando nos miraba con una sonrisa ansiosa. El profesor de interpretación se impacientaba cuando respondía a sus preguntas con tartamudeos, y a menudo Norma Jeane tardaba varios minutos en entrar en escena, como si estuviera en un trampolín muy alto haciendo acopio de valor para lanzarse, como si ese valor procediera de un sitio muy profundo y tuviera que hacer un gran esfuerzo para encontrarlo. La castigábamos de la única manera que conocíamos. Dándole a entender:
No te queremos. Éste no es tu lugar. Serías más convincente como vagabunda o puta. No eres lo que buscamos. No eres lo que necesita La Productora. Tu interior no concuerda con tu apariencia. Eres un bicho raro
.
El amor divino siempre ha satisfecho y siempre satisfará todas las necesidades humanas.
M
ARY
B
AKER
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,
Ciencia y salud
con clave de las Escrituras
Septiembre de 1947 / / Hollywood. Cal.
¡Desperté temprano! No pude dormir después de las seis, toda la noche despertando, sudando, escuchando voces eufóricas y de advertencia / / Éste será el día que determinará mi
FUTURO / /
el corazón golpeteaba ya contra mis costillas como si un pequeño pájaro estuviera atrapado en mi interior. Pero creo que es un sentimiento
bueno y feliz
Los pájaros cantaban en mi ventana del club de La Productora / / una buena señal entre la hierba alta, el estramonio / / oropéndolas, esa llamada acuosa, el desvelado y estridente arrendajo / / y el recuerdo de una voz / / el sueño de un hombre (un desconocido) advirtiéndome de algo importante en mi vida / / yo aterrorizada porque no oigo o no entiendo las palabras como si estuvieran en una lengua extranjera
Hoy me enseñarán el célebre
AVIARIO
del señor Z / / su premiada colección de pájaros que sólo han visto los privilegiados / / más tarde la audición para
Scudda-Hoo! Scudda-Hay!
con June Haver / / El señor Shinn dice que soy más guapa y tengo más talento que June Haver, me gustaría creerle / / Lo cierto es que soy la única de la clase a la que han llamado para la audición de esta película / / no es más que un papel secundario, desde luego
La cabeza cubierta de rulos de plástico rosa / / ¡36! / / Ha sido una tortura apoyar la cabeza en la almohada / / el cuero cabelludo me duele y escuece / / pero no tomaré píldoras para dormir como me han aconsejado / / Sacudí mi cabellera «nueva» / / la cepillé y la rocié con laca / / todavía no estoy acostumbrada / /
Mi pelo se ha puesto totalmente blanco, como si hubiera sufrido una terrible impresión
Enferma de nervios y preocupación / / 5 meses sin visitar a madre y debo enviarle $$$ / / Es una suerte que Bucky no pueda verme ahora porque se horrorizaría / / No culpo a los Glazer / / es todo un shock verme / / una muñeca con esta melena rubia y ahuecada / / y el pintalabios rojo y las prendas ceñidas que el señor Shinn quiere que use
El miedo nace de la esperanza
, dijo una vez mi madre / / si puedes desterrar la esperanza de tu vida, también desterrarás el miedo / / estos veinte minutos de ansiedad aplicando el maquillaje / / lo estropeé, lo retiré con crema limpiadora y empecé de nuevo / / Ay Dios estas cejas marrones con los extremos hacia fuera y no hacia dentro como las mías / / se ven tan
FALSAS
las cejas marrones con el pelo rubio platino / / si la doctora Mittelstadt me viera ahora / / o el señor Haring / / o Bess Glazer / / me sentiría
AVERGONZADA
Han talado muchos árboles en Hollywood Boulevard / / también en Wilshire y en Sunset / / Los Ángeles ahora es una nueva ciudad / / desde la guerra / / La abuela Della no la conocería, ni siquiera Venice Beach / / después de la guerra, Otto dice que habrá otras guerras / / el capitalismo conducirá a nuevas guerras / / siempre hay guerras nuevas, sólo cambian los enemigos / / Asfalto / calles / aceras / edificios nuevos / / Ruido, chirridos y la tierra temblando como en un terremoto / / Topadoras / grúas / hormigoneras / taladros / / Han nivelado las colinas de Westwood y construido calles y edificios nuevos / / «Esto era un pueblo rural», dice Otto / / vivía allí cuando llegó a Los Ángeles / / Casi es posible oír cómo palpita Los Ángeles / /
ME ENCANTA / /
He nacido aquí, soy hija de esta ciudad y nadie necesita saber nada más / /
ME INVENTARÉ A MÍ MISMA COMO HA HECHO ESTA CIUDAD / /
sin mirar atrás
Desayuno en Schwab’s / / todos los ojos fijos en mí al entrar / / en clases de interpretación una aprende a estar «ciega» ante el público / / y allí, encima de la fuente y la parrilla, un gran espejo / / y mi reflejo en el interior / / siempre parece sacudirse como en una película muda / / Oh Dios no es elegante la chica del espejo en Mayer’s / / Pienso en tía Elsie, que me quería / / y me traicionó / / Sin embargo: la chica del espejo es tímida y está asustada de verse
oh Dios la vida que he dejado atrás
Esos diminutos colibríes son un misterio / / al principio parecían abejorros / / al verlos esta mañana detrás del club de La Productora volví a oír a la abuela Della / / creo que me ha perdonado / / me quiere / / El colibrí es mi pájaro favorito: tan pequeño, fuerte, audaz, temerario / / (Pero ¿no los matarían los halcones?, ¿los cuervos?, arrendajos, etc.) metiendo los largos y finísimos picos en las campanillas para sorber su dulce néctar puedes darles de comer en la mano como a otros pájaros / / tres colibríes esta mañana / / deben comer continuamente o se consumen y mueren / / pequeñas alas agitándose tan rápido que no las ves / / se desdibujan, emborronan / / y su corazón palpita tan deprisa / / pueden volar hacia los lados y hacia atrás / / Dije:
Es como pensar, abuela / / los pensamientos pueden volar en cualquier dirección
¿Quiero a Otto Öse?
¿Me gusta el sufrimiento / el miedo?
(Pero él no me haría sufrir, estoy segura / / en realidad no / / últimamente me mira con más afecto a través del objetivo de la cámara / / porque gano $$$ para él / / ¡aunque no es la única razón!)
Schwab’s es un escenario / /
en todo momento debes decirte soy una actriz y estoy orgullosa de serlo porque el secreto de la interpretación es el control / /
soy tímida / / titubeo / / sus ojos atentos y risueños se clavan en mí / / igual que en cualquiera que entre / / unas pocas sonrisas y saludos / / las cabezas se giran para ver mi pelo nuevo y mi figura con este traje blanco de falsa piel de tiburón que planché tan escrupulosamente esta mañana / /
Vaya es ella cómo se llamaba / / Norma Jeane / /
no es más que una figurante sin importancia de La Productora / / sin influencias / / los ojos femeninos se arrugan / / dos o tres hombres miran desvergonzadamente / / pero casi todos apartan la mirada decepcionados / / la chispa de esperanza se desvanece como una llama que se apaga
El viernes pasado entré en Schwab’s después de mis ejercicios matutinos con la cara sonrosada y sintiéndome bien / / nada nerviosa y quién estaba en la barra tomando café y fumando sino el mismísimo Richard Widmark / / me miró fijamente y me sonrió / / me preguntó mi nombre y si estaba en La Productora / / quizá me había visto allí / / conversamos y yo estaba nerviosa pero no tartamudeé / / me atravesaba con los ojos como en sus películas y me eché a temblar / / supe que ese hombre quería más de mí de lo que yo podía darle / / retrocedí con una sonrisa y mi nueva risa que es suave como una cascabel / / cuando recuerdo / /
Bueno Norma Jeane
dice Widmark con su sonrisa torcida
puede que algún día trabajemos juntos / /
y yo digo
Estaría encantada Richard / /
(me pidió que lo llamara
Richard / /
y me preguntó el nombre de mi agente)
Esta mañana no había nadie en Schwab’s / / eché un vistazo rápido a la barra, las mesas y los reservados / / en el espejo la joven tímida y asustada con un traje de falsa piel de tiburón / / no está allí, es un fantasma
Gracias a Dios llegó el señor Shinn y me sentí segura / / adoro a mi agente / / Otto me llevó hasta él / / un hombrecillo jorobado como un enano con cejas muy pobladas, frente hundida, casi calvo y se peina la media docena de pelos teñidos de marrón por encima de la coronilla / / es el Rumpelstiltskin del cuento de hadas que me contaba Della / / el enano feo que enseñó a la hija del molinero a hilar la paja para convertirla en oro / /
¡Ja! ¡ja! ¡ja!
La risa del señor Shinn es un pico golpeando sobre una roca / / sin embargo creo que sus ojos son inteligentes y curiosamente bonitos para un hombre / / parece inquieto tamborileando con los dedos sobre el mantel / / siempre lleva un clavel rojo en la solapa (¡uno fresco cada mañana!) / /
Norma Jeane el futuro podría ser muy interesante para los dos / / No olvides tu cita con Z a las 11 ¿vale?
como si fuera a olvidarla / / Dios mío
¿Quién es esa rubia con pinta de vagabunda?
preguntó el señor Z al verme según uno de mis supuestos amigos / / Yo había ido a La Productora con pantalones y jersey y él debió de verme / / como no sabe mi nombre olvidará el incidente, espero
Otto está orgulloso de mis fotos «artísticas» en
U. S. Camera / / Una fotografía es composición / luz y matices oscuros / / no es una cara bonita
Otto me ha dejado
La anatomía humana
para que la estudie / / y dibujos de Miguel Ángel y de un artista del siglo
XVI
Andreas Vesalius que quiere que memorice / /
Los hombres te desean con un alma a la que sólo se accede a través del cuerpo
(Pero Otto ya no me toca / / sólo como un fotógrafo que ayuda a su «modelo» a encontrar la mejor pose)
El señor Z aparenta la edad de algunos de los inmigrantes europeos mayores / / no es tan viejo, creo / / En la sala de ejecutivos donde nos sirven bebidas lo he mirado con disimulo / / corren rumores sobre él, desde luego una vez vi (me pareció ver) a Debra Mae / Lizbeth Short con el señor Z / / con gafas de sol y una pamela que le tapaba la mitad de la cara y salían del aparcamiento en el Alfa Romeo del señor Z / / El señor Z ahora es famoso en California aunque nació en un pequeño pueblo de Polonia y emigró a este país con sus padres cuando era un niño / / su padre era vendedor ambulante en Nueva York pero el señor Z a los veinte años (menos de los que tengo yo ahora) ya había construido y dirigía el Parque de Atracciones de Coney Island / / Y más tarde una feria ambulante / / Dicen que es un genio para descubrir talentos y crear un público para algo que no existía antes y nadie había imaginado / / En su feria ambulante el señor Z puso un tragafuegos, un yogui (de la India) que podía andar y sentarse sobre brasas, un Pulgarcito, un gigante, un cerdo bailarín y un pobre negro con parte de sus entrañas fuera del cuerpo / / y a la edad de veintidós años el señor Z era millonario y empezó a hacer películas mudas en un almacén de Lower East Side y en 1928 se mudó a Hollywood y se asoció para fundar La Productora / / creando estrellas como Sonja Henie la campeona de patinaje, los quintillizos Dionne y el pastor alemán policía Rin-Tin-Tin / / Y Myrna Loy, Alice Faye, Nelson Eddy, Jeanette MacDonald y June Haver / / y tantos otros que me mareé de sólo oír sus nombres / / (se dice que al señor Z y otros pioneros de Hollywood les gustan los cuentos de hadas y las viejas leyendas) / / La secretaria del señor Z me miró con frialdad / / me hizo repetir mi nombre y yo tartamudeé / / dentro del despacho el señor Z estaba al teléfono y gritó
¡Entra y cierra la puerta!
como si le hablara a su perro / / así que entré / / temblando y sonriendo
Una rubia entrando en el despacho de un caballero con altas ventanas con cortinas y relucientes muebles de teca y cristal / / el caballero sentado detrás de la mesa mirando con desconfianza y evaluando / / Agucé el oído para ver si la música de esta escena me daba alguna pista / / no oí nada
Detrás del despacho del señor Z, que es tan grande como uno imaginaría, está su apartamento particular, al que pocas personas pueden pasar / / (el señor Shinn, por ejemplo, nunca ha entrado / / se reúne con este gran hombre en su oficina o en la sala de ejecutivos) / / pero él me llevó detrás y de repente me asusté / / espero que no se notara / / Naturalmente había ensayado mis palabras pero me olvidé / / porque en esta situación no sabía lo que diría el señor Z cosa que habría sabido si se hubiera tratado de un texto dramático en una clase de interpretación / / así que no sirve de nada ensayar lo que va a decir una / / Sonreí al ver a la rubia en un espejo que estaba encima del sofá / / con el traje de falsa piel de tiburón que realzaba su joven y voluptuosa figura / / estaba guapa y aquello era lo que veía el señor Z / / Sonreí con alegría deseando que el pánico que sentía no se reflejara en mis ojos / / tropecé con el borde de la alfombra y el señor Z rió / /
¿Lo haces adrede? / / ¿Crees que estamos en una película de los hermanos Marx? / /
Reí aunque no entendí la broma / / si es que era una broma
El señor Z es casi un dios en La Productora así que impresiona visto de cerca / / no es alto y lleva ropa cara y holgada / / detrás de los cristales ahumados de sus gafas bifocales sus ojos estaban inyectados en sangre y amarillos como si tuviera ictericia / / olía a licor y a puros cubanos (algunas chicas seleccionadas servíamos cigarros y bebidas al señor Z, los ejecutivos y sus invitados en el salón privado de La Productora / / vestidas como chicas de un cabaret / / era un privilegio, porque nos daban propinas / / siempre corrías el riesgo de que no te renovaran el contrato si te negabas / / sin embargo en esas ocasiones el señor Z no me prestaba mayor atención y parecía preferir a las pelirrojas) / / De todos modos me invitó a ver su
AVIARIO
y eso era un raro privilegio