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Authors: VV.AA.

Reacciona (9 page)

Infórmate. Si es preciso, usa una brújula y bucea por la Red. Ve a las librerías y compra libros. Lee, si no lo has hecho, a los premios Nobel Krugman y Stiglitz, a Naomi Klein y Susan George y a todos los citados en este libro. Recomienda a otros si encuentras algo que te aporta conocimientos o inquietudes, descúbrenos hallazgos. Haz que destierren de los pupitres de superventas a los autores que manipulan o entontecen. Por la lógica de la oferta y la demanda, si tú quieres y muchos otros quieren, y todos se lo cuentan a otros, acabarán relegados. Eduardo Galeano dijo: «Estoy comprometido con la pasión humana y con la certeza de que somos mucho más que lo que nos han dicho que somos». Lo somos.

Queremos ser felices. Tenemos derecho a ello. Pero buscando un bienestar personal que no hiera la conciencia. Juntos. Serena y firmemente. Toma posesión de ti mismo, hazte cargo de las riendas de tu vida, busca el bien común frente al egoísmo (así es el germen de la verdadera educación). Teje y ayuda a tejer. Avispas, abejorros, moscas, incluso alguna avutarda y reptil quedarán detenidos en la tela. No te quedes solo en casa con tu información. Sal. Comparte. Actúa. Como asegura un proverbio africano, «mucha gente pequeña,
en lugares pequeños, haciendo pequeñas cosas, puede cambiar el mundo»
.

VII
La generación estafada
Ignacio Escolar

Ignacio Escolar. Burgalés, nacido en 1975, es periodista. Fue fundador del diario
Público
como su primer director y actualmente continúa en el proyecto como columnista diario. También es autor de www.escolar.net, el blog de política más leído en castellano, y participa como analista en distintos programas de radio y televisión. Antes ha trabajado, entre otros medios, en
La Voz de Almería,
en Informativos Telecinco y también como consultor de prensa en Latinoamérica. Es también ponente habitual en congresos de periodismo digital.

Blog.
Escolar.net:
www.escolar.net

En 2010 uno de cada diez jóvenes españoles tuvo que volver a casa de sus padres. La natalidad cayó otro 3,2 por ciento. El paro juvenil superó el 40 por ciento y el consumo de tabaco de liar aumentó un 38 por ciento. No suele ser una cuestión de gustos, sino de precio. Nadie vive en casa de sus padres porque quiere, nadie se fabricaría sus propios cigarrillos si pudiese pagarlos.

Todos sufrimos la debacle, la derrota; este espanto que comenzó como una crisis financiera y que después ha derivado en una contrarreforma del modelo social europeo, de ese pacto para un capitalismo humano. Volvemos al siglo
XIX
: Europa abandona el debate sobre las 35 horas para discutir sobre las jornadas de 65 horas semanales. Europa quiere ser China. Ya nadie promete el paraíso al otro lado del telón de acero y el pensamiento único impone al fin sus normas a una sociedad atenazada, incapaz de reaccionar ante este abismo porque asusta más el miedo a caer aún más abajo.

Todos sufrimos esa perversa desconexión entre las causas de la crisis y sus consecuencias, no sólo los jóvenes. Pero esta nueva gran depresión ha infectado una fractura generacional que expulsa del sistema, hacia la miseria, a esa juventud a la que pomposamente se llamó «la generación mejor preparada de la historia de España» y que hoy vive de sueldos
mileuristas
y de la caridad familiar.

La sociedad española se argentiniza: desigualdad económica y éxitos deportivos. Y el consumo de tabaco de liar o la vuelta a la casa de los padres no son las únicas pistas de que algo falla. Hay al menos otros veinticinco datos que bastan para conocer la peor realidad de España: este país que, a pesar de la crisis, puede presumir de estar entre los diez más ricos del mundo, pero que socialmente avanza hacia el subdesarrollo. El nuestro es un lugar muy especial, campeones del mundo en muchas otras cosas además del fútbol o del baloncesto; único en el planeta Tierra. No lo digo ni por las horas de sol ni por la sangría ni por la paella ni por todos esos folclóricos atributos que el ministro de Turismo franquista Manuel Fraga convirtió en la década de 1960 en el gran lema nacional:
Spain is different
. Y tanto que lo es.

1. El salario medio en España es de 21.500 euros brutos anuales, de los más bajos de la UE-15 (la Unión Europea antes de la expansión hacia los países del Este). El sueldo medio español es la mitad que en Alemania, Holanda o Reino Unido. Además esos 21.500 euros anuales son una media muy engañosa. Según un informe elaborado en 2009 por GESTHA (el sindicato de los técnicos del Ministerio de Hacienda), el 63 por ciento de los españoles es
mileurista
o algo peor.

2. España es el segundo país de la UE-15 con mayor desigualdad económica, sólo por detrás de Portugal. En los últimos diez años la desigualdad ha aumentado todavía más. Según un informe del IVIE (Instituto Valenciano de Investigación Económica), el 10 por ciento de los españoles más ricos concentra una renta 7,6 veces superior al 10 por ciento más pobre. En 2003 esa relación era de 6,2 veces. El informe no incluye los últimos tres años aunque es más que probable que la crisis haya agudizado esta proporción.

3. La tasa de pobreza relativa en España fue del 20,8 por ciento en 2010, un 2,7 por ciento más que el año anterior, según el INE (Instituto Nacional de Estadística). Es una de las más altas de toda la UE. Sólo Letonia, Lituania, Rumania, Grecia y Bulgaria están peor. Eurostat, la oficina estadística de la UE, define como pobres a aquellos hogares cuyos ingresos netos no alcanzan el 60 por ciento de la mediana de los ingresos del total del país. En el caso español se consideran pobres aquellos hogares que ganan menos de 14.300 euros al año para una familia de dos adultos y un menor de 14 años; o menos de 16.680 para dos adultos y dos menores. Es posible que usted sea pobre y no lo sepa. La mayor parte de los pobres españoles no son conscientes de que lo son: todos nos consideramos clase media.

El 39,7 por ciento de los españoles no puede irse de vacaciones fuera de su casa, ni siquiera una semana al año. El 30,4 por ciento tiene problemas serios para llegar a fin de mes, siempre según el INE. El 36,7 por ciento no puede hacer frente a un gasto imprevisto. El 7,5 por ciento tiene retrasos cada mes para pagar gastos de la casa.

Cuatro de cada diez españoles han pasado por algún periodo de pobreza entre 1995 y 2007, en esos años en los que «España iba bien». Con la crisis la pobreza ha crecido todavía más. Según los datos de FOESSA, una fundación de Cáritas, el número de pobres en España creció en un 11 por ciento entre 2007 y 2009 hasta los 2.185.000 de hogares. Suman nueve millones de personas. De entre ellos, hay unos 700.000 pobres severos en España, que viven con menos de 3.000 euros al año.

4. Uno de cada cinco jubilados es pobre, según estos parámetros de pobreza relativa. El 77 por ciento de los pensionistas no llega a
mileurista
. España es uno de los países de Europa que menos gasta en pensiones: sólo el 8,4 por ciento del PIB cuando la media europea es el 10 por ciento.

5. La tasa de pobreza infantil en España es del 17,2 por ciento. Es la segunda más alta de la Europa occidental. Sólo está algo peor Portugal, según los datos de UNICEF (el fondo de Naciones Unidas para la infancia). «Ser un niño pobre en España no significa necesariamente pasar hambre, pero sí tener muchas más posibilidades de estar desnutrido» —asegura Marta Arias, la responsable de sensibilización y políticas de infancia de UNICEF en un artículo publicado en el diario
El País
—. «No significa no tener un techo donde guarecerse, pero sí habitar una vivienda hacinada en la que no existan espacios adecuados para el estudio o la intimidad, y en la que el frío o las humedades pueden deteriorar el estado de salud». En España dos millones de menores de edad viven en esas condiciones. Son esos niños que después, cuando sean jóvenes, tienen bastantes papeletas para convertirse en esos
ni-ni
que ni estudian ni trabajan, de los que después se nutre la pornomiseria que emiten algunos programas de televisión.

España es —con Grecia— el país de Europa que menos dinero público gasta en infancia y familia según UNICEF: sólo un 0,7 por ciento del PIB cuando la media europea es del 2,3 por ciento.

6. El ascensor social no funciona en España. La movilidad entre clases sociales se ha estancado desde la década de 1970 y el aumento en la educación de los jóvenes no ha reducido la desigualdad. Ha crecido el número de universitarios, pero al mismo tiempo se han elevado los requisitos para conseguir un puesto de trabajo privilegiado. Antes valía con una licenciatura y eran muy pocos los que la podían pagar. Hoy hace falta un MBA (Master of Business Administration) y son también muy pocos quienes se lo pueden permitir.

Los españoles estamos casi predestinados a ser un poquito más o un poquito menos de lo que fueron nuestros padres. Apenas hay saltos entre clases sociales. Según un estudio publicado por la revista del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) de los sociólogos Ildefonso Marqués y Manuel Herrera, el 32,9 por ciento de los españoles de 30 años tiene prácticamente la misma situación laboral y académica que sus padres. Entre el 67,1 por ciento que cambia de clase social, son minoría los que dan un salto verdaderamente relevante. Cambian los trabajos y la sociedad, y los hijos de campesinos se convierten así en obreros cualificados. Pero apenas se modifica su posición en la pirámide social.

Y mientras tanto, en el otro extremo de la galaxia...

7. Los altos directivos españoles son los mejores pagados de Europa según un estudio de la consultora francesa Alpha Value, que ha comparado las 354 empresas más grandes de la UE. Su sueldo no ha parado de crecer a pesar de la crisis. Según los datos publicados por las propias empresas ante la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), en el peor año de la crisis, en 2009, los sueldos de sus consejos de administración y cúpulas ejecutivas aumentaron un 15 por ciento.

Los 584 consejeros y altos directivos de las empresas del IBEX 35 cobraron un millón de euros de media. Es un sueldo equivalente a 113 salarios mínimos españoles. Nunca antes han ganado tanto en relación con el salario mínimo. Si nos fijamos sólo en los 83 consejeros delegados y otros altos ejecutivos de las principales empresas cotizadas, su sueldo medio es de 2,7 millones de euros anuales: 313 veces el salario mínimo.

Al año siguiente, en 2010, los sueldos de esos altos ejecutivos españoles del IBEX subieron otro 20 por ciento más, hasta los 3,2 millones de euros de media: 150 veces el sueldo medio de un español, 360 veces el salario mínimo. Nunca antes en la historia han cobrado tanto dinero ni en términos absolutos ni menos aún comparados con el salario medio.

8. Mientras los grandes salarios se disparan, el sueldo medio real de los españoles no sube, sino que baja, si descontamos la inflación. España es el único país de entre todos los socios de la OCDE (los 34 países más ricos del mundo) cuyo salario medio real ni siquiera aumentó durante los supuestos años buenos, en los que la economía española crecía a todo gas. Según los datos de la OCDE, entre 1995 y 2005, el salario medio real en España perdió un 4 por ciento de poder adquisitivo. Entre 1999 y 2006 los beneficios empresariales españoles crecieron un 73 por ciento.

9. España es uno de los países de Europa con menos porcentaje de trabajadores afiliados a los sindicatos: sólo el 15 por ciento. España también es el país europeo con mayor número de empresas afiliadas a la patronal: el 72 por ciento.

10. Los beneficios de las grandes empresas españolas han aguantado bastante bien la crisis económica. En el año 2010 las compañías del IBEX 35 ganaron cerca de 50.000 millones de euros, un 21 por ciento más que el año anterior. Es el mejor resultado de toda la historia del IBEX 35, por encima de los beneficios del año 2007, cuando sumaron 49.246 millones. A pesar de la crisis en ningún momento las grandes empresas españolas han entrado en pérdidas. Han ganado algo menos, pero ni siquiera en el año más duro, en 2009, los beneficios de las treinta y cinco grandes de la Bolsa de Madrid bajaron de los 40.000 millones anuales.

11. Telefónica ganó 10.167 millones de euros en el año 2010. Es el mayor beneficio jamás declarado por una empresa española, un 30,8 por ciento más que en 2009. A pesar de estas mareantes cifras Telefónica ha presupuestado 658 millones de euros en 2011 para reducir su plantilla. Casi la tercera parte de ese dinero para despidos, 202 millones, se gastará en España y Portugal, donde Telefónica obtiene el 37 por ciento de sus beneficios antes de impuestos y amortizaciones. Aún no ha concretado cuántos empleos piensa recortar, pero esos 202 millones en indemnizaciones por despido y prejubilaciones son sólo una parte de la factura. Hay otra parte que pagaremos el resto de los españoles a través de la Seguridad Social, como sucede siempre que una empresa prejubila a trabajadores.

12. Los jóvenes españoles se tendrán que jubilar a los 67 años, tal vez más porque la UE presiona para que la edad de jubilación se eleve a medida que aumenta la esperanza de vida. Si son afortunados, algunos podrán cobrar la jubilación máxima aunque para ello tendrían que empezar a trabajar desde ya, y no parece fácil. Para ello conviene saber muy bien qué sector elegir si es que está en sus manos. En España los trabajadores que antes se retiran son los empleados de banca. Su media es diez años menor a la de los que más tarde se bajan del andamio, los empleados de la construcción. No sorprenden estas cifras, que a corto plazo no van a cambiar. El plan de fusiones de las cajas de ahorros que está dirigiendo el Banco de España tiene previstas alrededor de 15.000 prejubilaciones, el 15 por ciento de sus plantillas. Esos despidos del sector financiero los pagaremos los españoles a través de dos vías: desde el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria), el dinero público que se está prestando a bajo precio a los bancos y cajas. Y también desde la Seguridad Social a través de las prejubilaciones.

13. Los altísimos beneficios de las empresas españolas serían una fantástica noticia para la Hacienda pública... siempre y cuando se declarasen íntegramente aquí. El 82 por ciento de las empresas del IBEX 35 utiliza paraísos fiscales. El relevante dato, que aparece en otros pasajes de este libro, sale del Observatorio de Responsabilidad Corporativa, de su último informe sobre el año 2010. A pesar de los supuestos esfuerzos del G8 («La era del secreto bancario se ha terminado», anunció solemne Nicolas Sarkozy en la cumbre de Londres de abril de 2009) el uso de los paraísos fiscales para defraudar legalmente impuestos ha ido a más entre las grandes compañías españolas. En el año 2007 el porcentaje de empresas del IBEX 35 con filiales sin actividad operativa en paraísos fiscales era del 69 por ciento. Hoy son el 82 por ciento.

14. La propia España se ha convertido en una suerte de paraíso fiscal para empresas extranjeras a través de un subterfugio fiscal: las ETVE (Entidades de Tenencias de Valores Extranjeros). La compañía más grande del mundo, la petrolera ExxonMobil, tiene una filial en España que ganó en dos años 9.907 millones de euros y no pagó ni un duro a Hacienda. Esa empresa, ExxonMobil Spain, cuenta con un solo empleado, tal vez el trabajador más productivo del mundo: su sueldo es de 44.000 euros anuales y genera casi 5.000 millones al año de beneficios. La petrolera no sólo no ha pagado impuestos ni ha generado empleo sino que, además, se ha beneficiado de ayudas fiscales por valor de 1,5 millones de euros españoles.

15. España es uno de los países de la Unión Europea que menos invierte en I+D. Según los datos de Eurostat del año 2010 España invierte sólo el 1,38 por ciento del PIB en I+D mientras que la media europea es del 2,01 por ciento.

El gasto militar en España fue también un 1,3 por ciento del PIB según las tablas de 2009 que publica el Banco Mundial. Parece que gastamos lo mismo en ejércitos que en I+D pero el dato es engañoso: gran parte de lo que España contabiliza como I+D es también inversión militar.

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